La gastronomía africana es tan amplia como diversa. Hay muchas áfricas en África. En el norte encontramos influencias de las civilizaciones de la ribera del Mediterráneo mezcladas con las tradiciones locales. Éstas han generado por tanto una cultura riquísima y sus tradiciones se reflejan en las costumbres culinarias y alimenticias.
Los condimentos y las especias son imprescindibles en su cocina. Son los encargados de dar sabor a las salsas con las que se acompaña a las bases, de féculas y cereales. Juegan un papel importante ya que potencian y aportan sabor y color.
La función de estos ingredientes, consiste en proporcionar a sus platos en crudo, cocido, asado, encurtido, ahumado…un toque especial provocativo a todos nuestros sentidos para saciar el hambre con creatividad. La clave de esta cocina tan colorida y con tanto sabor se lo deben a la buena combinación de ingredientes y aderezos para cautivar todos los paladares.
El acompañante básico de los platos tradicionales africanos son las salsas, como el Fufu, preparado con una masa de tubérculo, que suele ser insípida para quienes no están acostumbrados a ella pero la salsa aderezada con especias, consigue darle otro aspecto e impacto tanto en lo visual como en el sabor. Su color naranjo intenso hace que el comensal no se olvide nunca del plato.
Condimentos de África
Los principales condimentos y especial, al menos lo más comunes, son los siguientes:
Los maníes o cacahuates: Es el elemento estrella. Se consume natural o tostado. También se extrae de ellos -versión poco conocida en otros continentes- la harina de maní. Su versión en aceite es más utilizada. La mantequilla de maní tan famosa y tan de moda hoy en día tiene su procedencia aquí, aunque su uso cambie, en el continente africano lo utilizan como base de salsa.
Los chiles africanos: muy aromáticas y también picantes. Aportan sabor y un toque único a cada plato. Se suelen comercializar frescos o secos. Se usan para guisos, salsas y las típicas sopas. Un uso menos común es tomarlo como aperitivo porque son muy digestivos y tienen un alto contenido en vitamina C.
El Egusi: producto típico de la África Occidental, proviene de las semillas del pistacho y se utilizar para espesar sopas o preparar las salsas que acompañan la carne y el pollo.
La sal de Namibia: es una sal muy potente que con una dosis pequeña consigues un gran sabor. Y es que las aguas más profundas de la Antártica suponen un componente potenciador del sabor y el sol de Namibia consigue que llegue a nosotros en un estado puro. Aptos para cualquier plato. Otra sal del continente africano es la proveniente del desierto de Kalahari. El entorno seco en medio de la sabana seca del noreste de Bostwana consigue que esta sal tenga unas propiedades únicas y se diferencia mucho del resto de sales del mundo.
El Jengibre: otro condimento que está de moda y que se da en otros continentes. Este tubérculo es muy aromático y su sabor es extremadamente fuerte, es por ello que en África suelen utilizarlo con moderación, para que su fuerte presencia no dañe los platillos. También fuera del uso común lo emplean para la elaboración de cervezas y dulces. Lo podemos encontrar fresco, seco, molido, confitado y cristalizado.
El Baobab o el fruto del árbol de la vida, es una especia potente, sin secado porque la propia palmera se encarga de hacer el trabajo natural. El baobab en polvo es pura fibra, hidratos de carbono, proteínas y contiene Vitamina C y calcio. Bueno por si tienes falta de energía, anemia. Su sabor es cítrico, ácido y dulce. Perfecto para batidos y también para guisos.
Algunas de estas especias las conocemos porque son internacionales aunque luego no les demos el mismo uso, pero otra son diferentes y aptas para todos aquellos que viajen a África.