5 Aguas de sabores para este verano

5 Aguas de sabor para este verano

Las aguas de sabores estuvieron de moda entre las gurús de las dietas detox con la promesa de limpiar tus riñones y estar sano sin ningún otro esfuerzo más. Sin embargo, pese a todas sus propiedades, las aguas de sabores infusionadas están realmente ricas y hacen tu comida un poco más divertida.

Este tipo de aguas se hacen a través de un proceso de infusión en frío. Cuando mezclamos con el agua las frutas, hierbas u hortalizas, éstas transfieren al agua su sabor. ¿El resultado? Una bebida con las mismas calorías que el agua (ninguna) pero con un sabor diferente. Es tan simple como reciclar alimentos que ya tengamos en casa. Si por ejemplo, pelamos una piña para merendar, podemos utilizar la piel para el agua, lo mismo con cualquier otra fruta o el tallo de una hortaliza. También podemos hacer uso de la licuadora y añadir agua.

¿Cómo hacemos el corte para el agua de sabor?

No hay una medida específica pero es preferible utilizar trozos grandes como rodajas o ramas enteras que luego sean fáciles de retirar. En caso de que queden restos y molesten, podemos retirarlo con un colador. Para que el agua absorba el sabor se necesitan unas 10 horas, si va a durar más de 24 horas es conveniente quitar los vegetales o hierbas y dejar solo el líquido.

Os proponemos unas combinaciones que están realmente líquidas pero es una cuestión de gustos, cada uno puede ser creativo y probar en casa. Aconsejamos utilizar semillas como complemento. La cantidad de agua requerida en esta ocasión es de 1,5 litros. Sugerimos agitar un par de veces.

1. Pepino, limón (o lima) y semillas de chía

Licuar un pepino y exprimir dos limones. Mezclar con el agua. Dejar reposar unas cuantas horas y colar (en caso de que no gusten las pulpas). Al final añadir las semillas de chía, que reposen unos 10 minutos y listo para beber.

2. Pepino, limón (o lima) y lavanda

Esta opción con pepino, es más sencilla. Utilizar la piel de un pepino a tiras o unas 12 rodajas no muy gruesas del mismo. Medio limón en rodajas finitas y una cucharadita de flores secas de lavandas. Reposar unas horas y a beber.

3. Sandía, menta y melón

Frutas veraniegas. Utilizamos las cáscaras de sandía y melón con un poco de carne y quitamos un poco la parte verde de fuera (es decir, un poco de pulpa y algo de parte blanca). Las ponemos en agua con un par de ramas de menta y ¡te sorprenderá!

4. Jengibre, limón y cúrcuma

En esta ocasión limpiamos muy bien el jengibre y le quitamos la piel. La partimos en rodajas y la dejamos reposar con el agua. Luego, exprimimos medio limón y con el otro medio partimos rodajas que añadimos a la jarra. Por último añadimos media cucharadita de cúrcuma y listo, asombroso tanto el olor como el sabor.

5. Zanahoria, pepino, cilantro y cardamomo

Partimos la zanahoria en tiras con un pelador o con un cuchillo, pero algo fino. Añadimos unas tiras de la piel del pepino (o rodajas) y un par de ramas de cilantro. Luego, aplastamos en un mortero o con la base de un vaso el cardamomo (un par de vainas) y terminado. Otra agua de sabor refrescante.

Estas son algunas sugerencias que hemos probado y nos encantan pero puedes innovar en casa tanto como quieras, hay infinidad de combinaciones. Es una cuestión de creatividad y gustos. Para que esté frío basta con añadir unos hielos o dejarlo en el frigorífico.