El poder inigualable del jengibre

Jengibre

Cada vez más vemos a nuestro alrededor (fruterías, supermercados, tiendas gourmet, herbolarios) un producto que hasta hace bien poco era totalmente desconocido para nosotros: el Jengibre. A día de hoy ya le damos más uso y es que empezamos a conocer sus propiedades y sobre todo, sus beneficios para la salud y de ahí viene que lo incluyamos más y más en nuestra dieta y sobre todo, recetas de todo tipo. Pero, ¿qué es el jengibre? ¿Por qué es tan poderoso? ¿Por qué nos ha costado tanto conocerlo y darle la importancia que tiene?

¿Qué es el Jengibre?

El jengibre es una raíz, una poderosa raíz que ya se conoce desde hace más de 2.000 años en China como un poderoso remedio para casi todos los males siendo fundamental en la Medicina Tradicional China la cual lo tiene como una pieza clave de sus soluciones.

Es, como decíamos, una raíz con aspecto rudo (por su forma desigual y tacto) que a veces no parece nada agradable y además con un sabor un tanto “especial” por no decir que realmente es picante y duro de comer “tal cual” (de hecho, masticar jengibre es muy beneficioso para la salud pero realmente es de valientes y sólo algunos son capaces de ello).

Es una raíz que da vida a una planta que puede alcanzar los 2 metros de altura con hojas lineares de hasta 20 centímetros.

Es una raíz muy rica en hidratos de carbono pero también grasas (saludables) que contiene y por lo tanto nos aporta muchos aminoácidos, minerales y vitaminas. Al margen y no por ello menos importante, tiene un alto porcentaje de flavonoides, curcumina (mira aquí la potencia de la cúrcuma), gingeroles y por supuesto, aceites esenciales que como su propio nombre indica, son fundamentales. Todo este puzzle lo convierte en muy poderoso.

Riqueza nutricional

Además de los componentes que hemos descrito, el jengibre también tiene y de forma más específica:

  • Grasas: Hasta un 8% y cabe destacar los ácidos grases esenciales (oleico y linoleico).
  • Vitaminas: niacina y la C.
  • Hidratos de carbono: Hasta un 50%.
  • Aminoácidos: Ácido aspártico, tirosina, triptófano, valina, glutamínico, metionina, histidina, asparagina, leucina, arginina…
  • Minerales: Silicio, zinc, boro, manganeso, cobalto, fósforo…
  • Y otros nutrientes: Tales como ácido oxálico y flavonodies.

Beneficios para la salud

Su nombre original y auténtico es el Zingiber officinale) y está catalogada como planta (a pesar de ser una raíz) medicinal y su poder como anti-inflamatorio es ahora ya, sobradamente conocido aunque queda camino por recorrer pero es muy potente en cualquier dolencia inflamatoria, ayuda a combatir enfermedades respiratorias, diabetes, artrosis y por supuesto, no hay nada que lo igual en cuanto a problemas digestivos se refiere.

Además de para curar o mejorar ciertas enfermedades, el jengibre también es muy utilizado para conseguir adelgazar o en tratamientos de pérdida de peso.

Si numeramos sus beneficios y sólo quedándonos con los 7 más representativos (porque haber hay muchos) tendríamos:

1.- Dolores: Con el jengibre conseguirás disminuir todos o la gran mayoría de dolores con origen inflamatorio como los reumáticos, los menstruales, dolencias de huesos y musculares…

2.- Sistema respiratorio: Es realmente potente para todas las dolencias respiratorias como gripe, resfriado o cualquiera de este aspecto.

3.- Circulación sanguínea: Por su alto contenido en magnesio y zinc, el jengibre es clave para la circulación sanguínea ayudando a inhibir la acumulación de colesterol (del malo) en el hígado.

4.- Absorción de nutrientes: La raíz del jengibre ayuda a que nuestro organismo absorba mejor todos los nutrientes que consumimos día a día ya que estimula la secreción de estómago y las enzimas pancreáticas. Si se mastica jengibre antes de la comida, abrirá el apetito con lo que realmente es muy bueno para personas con falta de apetito.

5.- Problemas digestivos: Ayuda, notablemente, a mejorar la digestión y los procesos digestivos aliviando los dolores abdominales que se suelen aparecer en los momentos de inflamación estomacal. Es muy positivo para combatir el estreñimiento, reducir gases y hacer la digestión más ágil.

6.- Potente para el sistema inmunitario: Todos tenemos el sistema inmunitario un poco debilitado por nuestra alimentación, ritmo de vida y situaciones actuales. El jengibre ayuda a fortalecerlo y prepararlo ante infecciones habituales como gripe o incluso, ante enfermedades crónicas. Incluso, puede reducir el riesgo de sufrir un derrame cerebral.

7.- Acciones contra el cáncer: Algunas investigaciones recientes (aunque los chinos podrían decir que ellos lo saben desde hace muchos, pero que muchos años) confirman que el jengibre tiene sustancias que combaten y mucho a las células cancerígenas consiguiendo frenar su crecimiento sobre todo en el colon y la próstata.

¿Cómo consumir jengibre?

El jengibre es muy polivalente y al ser una raíz, puede durar mucho tiempo fresco y con todas sus sustancias a pleno rendimiento.

Una opción es comprar la raíz directamente y rallarla sobre tus platos, batidos, sopas, etc.

Otra opción es en trocitos, incluirlas en tus infusiones habituales. Con limón potenciarás su sabor.

Y por último y como algo muy fácil de usar es el jengibre en polvo (que además encontrarás en nuestra tienda en bote de cristal listo para usar) y que puedes añadir en cualquier momento también en tus platos e infusiones.

Cuando no consumir jengibre

Como todo, aunque es muy poderoso y beneficioso en la mayoría de casos (incluso si no tienes ninguna dolencia, te dará vigor y te ayudará a prevenir ciertas enfermedades) el jengibre no está indicado sobre todo, en dos situaciones:

  • Cálculos biliares o renales: Es mejor prescindir de él porque el jengibre estimula la vesícula biliar y los riñones con lo que podría potenciar la aparición de cálculos.
  • Embarazo y lactancia: A pesar de que el jengibre puede aliviar nauseas y vómitos que aparecen sobre todo en el primer trimestre del embarazo, es mejor no tomarlo o tener precaución porque en este periodo el jengibre puede causar acidez estomacal y somnolencia. Y en la lactancia, aún al menos en occidente, desconocemos sus efectos sobre el bebé.
  • Si tomas medicamentos para la diabetes, la presión arterial o anticoagulantes, sí hay que tener cuidado con el jengibre y al menos, consultarlo con el médico.

Si tenemos en cuenta su posible toxicidad es casi nula o inexistente por lo que puedes consumir jengibre siempre que quieras y en la cantidad que consideres oportuno. Si hay que destacar algún “efecto secundario” por decirlo de alguna manera, es el aumento de la temperatura corporal cuando se consume jengibre y esta viene dada por la aceleración metabólica que la raíz provoca.

El jengibre para adelgazar

Algo que te ayudará a adelgazar y empezar bien el día es sin duda alguna, tomar en ayunas, agua con jengibre porque pondrás tu cuerpo a funcionar de manera saludable. Una vez has hecho esta acción, puedes utilizar el jengibre para adelgazar ya que ayuda a acelerar el metabolismo así como a reducir la inflamación (estar hinchado).

Incluye el jengibre en tu dieta siempre que puedas pero por supuesto, debes tener hábitos saludables de alimentación, de saber comer bien, de hacer ejercicio y cuidarte.

El jengibre en zumos y batidos

Es una de las formas más habituales (junto con las infusiones) de consumirlo ya que su sabor picante puede pasar más desapercibido y al estar en crudo, guarda todas sus propiedades.

Elige los ingredientes para tu zumo – batido que prefieras (puede ser verde – detox, rojo – fortalecedor, etc) y añade jengibre en polvo directamente antes de tomar. Le dará un toque picante único que notarás según la cantidad de jengibre que añadas y además de los innumerables beneficios que estarás incluyendo para tu organismo, el sabor será siempre, diferente. Ve probando, pon un poco la primera vez y después, podrás ir subiendo la “dosis”.

 

El jengibre es sin duda un gran descubrimiento para todos los occidentales que debemos hacernos eco de esta potente raíz. Un secreto… Añádelo en tus postres, es realmente impresionante el resultado que podrás tener.