Limón… Frescor, acidez, intensidad, color y olor. Todo en una sola piel.
Siempre en nuestra mente, desde la infancia, los famosos y clásicos twist de cáscara de limón, aún hoy en día, en el boom de los cócteles y los gin-tonics, sigue vigente y con mucha fuerza. Ahora, una versión más sofisticada, más intensa y con mucho mayor sabor: la piel de limón seca cortada en cuidadosos “trocitos”, el mejor tamaño para tu copa.
Y qué decir de los beneficios del limón. ¡Qué harían nuestras madres y abuelas sin él! Y lo que es más importante, ¿qué haríamos nosotros en cualquier momento culinario sin un buen limón? Será que a beneficios para el organismo no lo gana nadie.
Cítrico por excelencia, el más conocido y extendido de nuestra (por no decir todas) las gastronomías y cocinas del mundo. El limón es un constante aporte de vitaminas y propiedades positivas. Si enumeramos para todo lo que es bueno, será una extensa lista pero sólo con algunas pinceladas, ya estarás convencido:
– Para tu piel es directamente, excepcional: elimina la grasa sobrante haciendo que luzcas una piel radiante, fresca y limpia.
– Potente blanqueador para manchas y dientes.
– Pone a raya la alcalinidad de la sangre y regula el ph de forma natural.
– El nerviosismo no se resistirá al limón.
– Su efecto anticancerígeno es muy potente y puede luchar fuertemente contra ciertos tumores.
– Fundamental su poder desintoxicante. Un excelente aliado del hígado y la función hepática.
– Y para resfriados e infecciones respiratorias, alíate con el limón y no tendrás ni una tos.
Empieza tu día con un buen vaso de agua templada y unos trocitos de cáscara de limón. Déjalo infusionar y añade jengibre. Notarás los efectos a los pocos días y no podrás dejar de tomarlo. La pregunta es ¿por qué dejar de hacerlo? Es un gesto fácil que cambiará a tu organismo.
Pero además de ser excepcional para la salud, el limón es un gran compañero para la coctelería. Los buenos barman lo saben y siempre tienen a mano la piel de limón. Ahora, con esta opción de primera calidad, lista para usar, es más fácil aún. Una buena pieza de piel de limón es indispensable para preparar el perfecto gin-tonic. Una vez que tengas preparado tu gin-tonic, espera 30 segundos para que todos sus ingredientes se fundan y añade entonces tu cáscara de limón. Será impresionante.