Si estás leyendo esto es que, posiblemente, tengas cierto interés en utilizar o comprar esta Sal del Himalaya tan instagrameable.
Pero como nosotros somos bastante poco de postureo, tenemos que advertirte de que lo que ves no es solo un packaging bonito, sino que a esta sal en calidad no le gana nadie.
Y es que tu nuevo producto fetiche viene desde Pakistán en forma de cristal rosa para que puedas apreciar la gran pureza con la que cuenta.
Ella, que a priori parece tan ruda, se va a convertir en tu mejor amiga en la cocina y te va a ayudar a presentar unos recetones de miedo, para ti, para tu familia y para tus visitas.
Además, la comodidad del packaging de Regional Co. le da ese puntito premium que buscas para ponértelo un poco más fácil cocinando. Y su cuerpo acrílico transparente con metacrilato en la parte superior te permite calcular cuándo hacer tu próximo pedido para que esta sal nunca falte en tu cocina.
Ojo, que eso no es todo.
Porque el mecanismo cerámico ajustable de molido uniforme es el que se encarga de que utilices solo la cantidad exacta en cada una de tus recetas. Ni más ni menos. Te avisamos de que el juego entre piezas al repartir la sal es casi adictivo.
¿Por qué ese color rosa-anaranjado?
Por su alto contenido en minerales y los 84 componentes naturales con los que cuenta, de los que destacan:
- Magnesio
- Potasio
- Sulfuro
- Hierro
- Magnesio
- Flúor
- Yodo
- Cromo
- …
Y se nos ocurre que algunas buenas recetas con esta Sal Rosa del Himalaya podrían ser:
- Posset de frutos rojos con chocolate de pistacho, avellana y sal del Himalaya.
- Chips de berenjena a la sal rosa del Himalaya.
- Arroz tipo paella con quinoa y sal del Himalaya.
- Tortilla de champiñones vegana con sal del Himalaya.
¿Se te hace la boca agua?
No nos extraña. Pídela ahora y te llegará a casa.